UNA VENTANA Y MI CASA
(Romance a-a)

Siento la luz del camino
abrazándome la cara
lejos del atardecer
cuado la luz es delgada
El mar se extiende a mis pies
con sus orillas doradas
las piedras son color gris
y el viento acaricia el agua.
El alabastro en las olas
nacido en la madrugada
encaje de vientre azul
se estira sobre la playa.
Yo me senté sobre un sol
pintado en la escalinata
contemplé aquel horizonte
rayado con luz morada
bajo un tiempo abarrotado
con agujeros de plata
y asechan las ventolinas
como amargas serenatas.
Me cobijó un viejo domo
brotado de telaraña
la noche cayo desierta
y oscurecí la mirada
para borrar los colores
que salpicaban el alma.
Sentí la luz en mi rostro
la oscuridad quedó atada
descendió por vericuetos
la paz que yo tanto ansiaba…
¡Senderos con altos pinos
una ventana y mi casa!
Carlos Alberto/Gallnnet